Con permanentes inversiones en tecnología, y procesos innovadores que favorecen la optimización de sus procesos, la industria de Nuevo León ha logrado importantes resultados durante los últimos años para utilizar menos agua durante la elaboración de sus productos, lo que le ha permitido colocarse como el sector que menos líquido utiliza en la entidad.
De acuerdo con el Registro Público de Derechos del Agua, en Nuevo León los sectores que utilizan la mayor cantidad de recursos hídricos son el agrícola con el 71%; el 25% está destinado para abastecimiento público, y sólo el 4% es consumido por la industria.
Entre las empresas que han registrado importantes avances para reducir el consumo de agua se encuentran la refresquera y cervecera. La primera de ellas ha reportado que entre 2012 y 2022 pasó de utilizar 1.82 litros de agua por litro de refresco, a 1.38 litros de agua, lo que representa una reducción de 24%
Y mientras que el promedio mundial de uso de agua para producir un litro de cerveza se ubica entre 4 y 6 litros, en México esa cifra se ubica hoy en tan solo 2.6 litros de agua por cada litro de cerveza, cuando anteriormente se disponían de 3.63 litros del líquido.
Las inversiones y acciones de la industria neoleonesa para contribuir a optimizar el uso de agua potable, se suman a las que por su parte realiza el gobierno estatal a través del Plan Maestro para Garantizar el Agua de Nuevo León hasta el 2050, documento que como parte de sus proyectos estratégicos, prevé que entre este año y el 2027 se construirán 132 nuevos pozos de baja profundidad, como los de la Macroplazay Fundidora, así como rehabilitar los que ya existen.
Además, plantea el objetivo de construir tres subsistemas de 20 pozos profundos en la Huasteca y la zona de Santa Ana–San Roque, y edificar la Presa Libertad que contará con capacidad de 220 millones de metros cúbicos, que se traducen en 1.6 metros cúbicos por segundo.
En cuanto a la recuperación de caudales agrícolas, en el documento que fue presentado por el gobernador Samuel García se precisa que la estrategia consiste en la construcción de infraestructura para obtener agua en zonas agrícolas como en el Río San Juan, y para lograr el reúso potable indirecto, se proyecta la construcción de cuatro plantas para el tratamiento avanzado de aguas residuales.
Mientras dicho plan continúa avanzando, la industria en Nuevo León mantiene sus acciones para enfrentar la actual crisis hídrica en el estado, entre las que se encuentran donaciones económicas, la cesión miles litro de agua a la red hídrica, la rehabilitación de pozos y el mejoramiento de sus procesos productivos para ahorrar el líquido.
Al respecto, la Cámara de la Industria de la Transformación (CAINTRA) informó que través del programa “Sumemos un Chorro”, las empresas afiliadas al organismo prevén otorgar en el mediano y largo plazos más de 25 millones de metros cúbicos en cesión para atender las necesidades básicas de la población, cifra que equivale a 33 millones de tinacos llenos, a 2.5 millones de pipas, o a mil 237 millones de garrafones de agua.